Para celebrar que hoy 13 de septiembre de 2024 llega a PC y Nintendo Switch el título de acción desarrollado por GodziPixel, Nimbusfall, de la mano de DevilishGames no se me ocurre nada mejor que traeros a Retro & Pixel Press su análisis. Un juego que se puede enclavar en el subgénero conocido como "Boss Rush" y del que se me ocurren unos cuantos exponentes de cierto éxito, entre ellos se destacan Cuphead (Studio MHDR - 2017,) Titan Souls (Acid Nerve - 2015) o el mítico Shadow of the Colossus de PlayStation 2 (SONY - 2005). Por si no sabes de lo que te hablo, los Boss Rush son juegos en los que la mecánica principal es ir enfrentándote uno tras otro de forma secuencial contra enemigos finales. Algo que era bastante habitual en la parte final de muchos juegos clásicos de la era de los 8 y 16 bits.
Enfrentarse a imponentes jefes finales, sin descanso, sin tregua, sin piedad,... hasta la victoria final o el clásico Game Over, que seguramente nos toque ver en más de una ocasión, es una experiencia frustrante y gratificante a partes iguales. Morir en el último momento cuando le quedaba un toque al último Boss, ser sorprendido por un ataque nuevo que nos impacta sin poder poner remedio, son dos de las típicas situaciones que pueden arrancar alguna palabra mal sonante de tu boca mientras te hierve la sangre. Por contra, acabar con un enemigo sin que nos toque o vencer al último jefe cuando estamos a punto de morir pueden provocar en ti un grito de alegría o un chute de dopamina a nuestro organismo que te haga estallar de júbilo. Así que si eres un amante de este tipo de emociones, Nimbusfall, es para ti.
Tu especie ha sido exterminada y la extinción es algo inevitable. Eres el último espécimen que queda en pie, el único superviviente, el testigo de la fatal tragedia, y la responsable de tu desgracia es la mismísima luna. Un luna llena de secretos y que se esconde en lo más alto de una torre protegida por poderosos secuaces que se interpondrán en tu ascenso. Ha llegado la hora de reclamar tu venganza, es lo único que te queda, no existe el miedo, ni si quiera el dolor, ya no tienes nada que perder, y eso te convierte en el guerrero más peligroso.
Nimbusfall tiene un argumento sencillo que sirve de base para un juego de acción directa donde la historia queda en un segundo o tercer plano, y donde lo importante es la jugabilidad y la diversión del desafío.
Este título de acción y desafiantes combates tiene como principal mecánica el "Boss rush", o lo que es lo mismo, el ir enfrentándote de forma continua a enormes y poderosos enemigos que te destrozan si te descuidas y a los que debemos golpear en numerables ocasiones para derrotarlos. Este tipo de juegos se caracterizan por ir directos al grano y evitarnos el paseo por niveles, las plataformas, las trampas,... aquí directos al turrón a repartir estopa. Este subgénero no es para todos los jugadores, pero a mi siempre me ha parecido que es perfecto para los amantes de los retos con alta tolerancia a la frustración y que disfrutan de la inigualable sensación de lograr la victoria.
En Nimbusfall lo importante son los combates y os puedo decir que cada uno de los 25 jefes a los que nos enfrentaremos en la torre se sienten únicos, ya que cuentan con ataques propios, patrones de movimiento diferentes y diseños muy originales, lo que hace que las luchas sean muy entretenidas. Como experiencia os puedo decir es que lo normal es que la primera vez que te enfrentas a un enemigo te golpeará en numerables ocasiones, salvo en honrosas excepciones, hasta que aprendes a esquivarlo. A medida que nos enfrentemos a ellos iremos conociéndolos mejor y podremos vencerlos, incluso sin recibir nada de daño.
Tras eliminar a nuestro enemigo pasamos por una sala de elección de armas, la cual tengo que reconoceros que es lo que menos me ha gustado del juego, ya que es un proceso totalmente aleatorio, lo que provoca que en ocasiones no podamos abandonarla sin coger el arma que nos ofrecen y te obliga a enfrentarte a uno de los jefes más complicados del juego con el palo, haciendo que la partida casi perfecta que estabas haciendo resulte un fracaso muy frustrante. Incluso, en alguna ocasión me ha dado a elegir entre dos armas, que son la misma, y que ya es la que portaba mi personaje... 3 armas iguales, ¿En serio? En este aspecto me hubiera gustado poder conservar un arma o mayor variedad en la elección, o que te tocasen en función al enemigo que te vas a enfrentar, pero el azar en estas cuestiones es un mal compañero de viaje y deja poco a una elección táctica.
Una de las cosas buenas que tiene Nimbusfall es que pese a ser un juego bastante exigente, intenta adaptarse a todos los públicos y te permite elegir entre cuatro modos de dificultad y también nos ofrece varias opciones sobre el número de vidas para nuestra aventura, si me aceptas un consejo elije 10 vidas en la primera partida que seguramente te hagan falta, e incluso, es posible que se te queden cortas. Además, si eres un profesional en este tipo de desafíos y te parece flojo también existe la posibilidad de activar el modo Turbo que hace que todo vaya mucho más rápido disparando el frenetismo y dificultad de tu aventura.
Los que gustan de jugar acompañados agradecerán que otra de las opciones que trae este título es la de jugar a dobles, ya que dispone de opción de cooperativo y podrás enfrentarte junto a otra persona contra los enemigos haciendo que la experiencia sea más divertida.
En el apartado visual, Nimbusfall, nos propone un pixel art minimalista pero atractivo y con un diseño de enemigos cuidado y muy original. Es como ver un combate de píxeles, no sabrás quien gana la contienda entre la simpleza y la belleza pero hay algo que entra por los ojos y llama poderosamente la atención. Los escenarios tienen poco detalle pero yo lo he agradecido para no distraer mis sentidos, ya que los necesitas todos para el desempeño en la desafiante lucha.
La banda sonora de estilo retro le viene niquelada para crear la ambientación que busca, básica pero desafiante, te hace sentir pequeño y ayuda a meterte de lleno en la acción y sentir la adrenalina.
En conclusión, Nimbusfall es un título de acción tipo Boss Rush, desafiante y emocionante, aunque no apto para todos los públicos, ya que puede ser frustrante en algunos puntos, sobre todo por la mecánica de aleatoriedad en la selección de armas o una combinación de ataques que no se puede esquivar. Pese a esos pequeños problemas es un juego entretenido y que provoca adicción, una vez que empiezas una run no podrás parar hasta vencer o morir.
En el apartado artístico el juego cumple con creces su propósito, se siente retro en su simpleza, suena "cañero" y centra tu atención en lo verdaderamente importante, los poderosos y gigantescos jefes que te harán sentirte indefenso, y que exigirán tu mejor versión para poder derrotarlos uno tras otro y lograr al fin tu ansiada venganza.
- Hemos realizado este análisis en PC con un código proporcionado por Devilish Games -
💚 Gratificante vencer a cada enemigo
💚 La variedad de jefes
💚 Adictivo y emocionante
💚 Llamativo pixel art
❌ El azar en la elección de armas
❌ Se vuelve repetitivo con el tiempo
❌ Pocas mecánicas de ataque
Director Retro & Pixel Press 📰
Podcaster en NESbuscando en la Basura y El Indiario 🎙️
Redactor en DeVuego 📝