"Sentry City - Un título de armas tomar"

El 15 de julio del pasado año llegaba a nuestros ordenadores, sin hacer mucho ruido, un título de acción y plataformas con una estética pixel muy apetecible desarrollado por Crashable Studios, su nombre, Sentry City.  

Hace unas semanas y de la mano de Flynns Arcade desembarcaba en la consola de Nintendo y su nombre empezaba a sonar por las redes sociales alcanzando mucho más visibilidad. En medio de está campaña más mediática gané un concurso organizado por Palomario64 y llegaba a mis manos Sentry City. Hoy en estás líneas vengo a contaros que me ha parecido.

Libera Sentry City del poder de la IA

La ciudad reposa en una negra calma, la noche, cerrada y te encuentras vaciando la última gota de un vaso en un bar de mala muerte. Estás en un futuro distópico donde las máquinas conviven con el ser humano, al menos hasta ese momento, ya que una IA ha dado la orden de acabar con todo resquicio de la humanidad y a ti te ha tocado estar en el sitio menos deseado en el momento menos oportuno.

Armado con una pistola deberás hacer frente a todos los robots que encuentres en tu camino por acabar con la IA. La ciudad parece dormida pero el peligro te espera en cada rincón y todo, absolutamente todo puede fulminarte en un instante. Así, arranca la historia de Sentry City, una narrativa muy simple pero lo suficientemente interesante para guiar esta aventura. Aunque el número de textos es reducido y se entiende bien, he echado de menos una traducción al español. 

Acción, desenfreno y una precisión milimétrica

En Sentry City encontramos un juego de acción y plataformas de la vieja escuela, de los de ensayo y error, muy de estilo arcade de tiempos pasados donde morir es la norma. La premisa es sencilla en cada fase deberemos superar unos cuantos obstáculos en forma de saltos medidos al milímetro, trampas, barreras a desactivar, plataformas móviles,... y todo esto entre un infierno de balas y explosiones que hacen que la acción tome un nivel frenético en muchos puntos de cada pantalla. Para finalizar nuestra misión deberemos acabar con una IA robótica en forma de cerebro que debemos destruir a balazos.

Además, cada 5 niveles encontraremos un jefe que nos hará sudar para derrotarlo. El diseño de estos enemigos finales es muy original y divertido, para mi lo mejor del juego. Tienen unos patrones de ataque complicados de dominar y exigentes. Te matarán una y otra vez hasta conseguir derrotarlos pero merece la pena verlos explotar. Las explosiones de los enemigos siempre me gustan, no puedo evitarlo. 

El diseño de niveles en cada fase de Sentry City es brillante, tienen muchos y diferentes obstáculos que requerirán una habilidad y destreza de nivel alto para superarlos. Es cierto que la variedad de enemigos y escenarios es muy limitada lo que hace que a medida que juegas se vuelva más repetitivo. Se echan de menos pantallas diferentes como la del elevador que le den variedad al juego y enriquezcan la experiencia. Una pena estos pequeños detalles que hubiesen mejorado mucho el juego. 

El gran desafío que nos proponen en Sentry City empieza siendo exigente pero divertido, requiriendo que pongas toda tu atención y que aprendas que hacer en cada enemigo u obstáculo para hacerlo bien en la próxima ocasión. Pero a medida que avanza el juego, el desafío puede llegar a ser muy frustrante y eclipsar la sensación de disfrute que se tiene tras lograr superar algo muy complicado. Lo que hace que no sea para todos los públicos. Y más si queremos obtener el final bueno, lo que nos obliga a terminar las pantallas con la máxima puntuación.

Una ambientación ciberpunk teñida de píxeles

Sentry City destila sabor añejo, un estilo pixel art llamativo y con mucho encanto que crean una ambientación de mundo distópico ciberpunk que te gana desde el primer vistazo. El diseño del personaje protagonista así como de los enemigos es detallista y con personalidad. Todo tiene un aire triste, como una tarde oscura de tormenta, pero que lo hace encantador. El único pero es que todo es muy parecido, se echa de menos un poco de variedad en los diseños. Aún así, es uno de los apartados más notables del título. Sentry City es muy bonito de ver.

La banda sonora utiliza una mezcla de sonidos tipo chiptune y música electrónica que le queda niquelada, no solo por la ambientación, sino también por el frenetismo de la acción a la que acompaña. Su elección y composición son un gran acierto. Los efectos de sonido enriquecen la experiencia. 

Conclusión

Tras probar una demo, a la que le falta mucho contenido por añadir, os puedo contar que Slime 3K: Rise Against Despot es un título altamente adictivo y muy divertido. Estoy esperando con muchas ganas a que llegue el 2 de noviembre y lo lancen, mientras tanto seguiré al mando de mi gelatina devorando y destrozando cantidades ingentes de enemigos.