Una generación entera de jugadores vio nacer y crecer su afición por los videojuegos en los salones recreativos de todo el mundo en los años 80 y 90 del pasado siglo. Un fenómeno que entró de lleno en la geografía de nuestro país y que inundó con máquinas de arcade multitud de lugares, hasta tal punto, que raro era el pueblo, por pequeño que fuese, que no tuviera una recreativa en el bar. El hecho de llevar monedas de 5 duros encima para poder echar unas partidas, es una sensación que los más viejos del lugar añoramos con cierta nostalgia. En mi caso, uno de mis juegos favoritos era el clásico desarrollado por Data East, Tumblepop, un juego de plataformas en el que manejamos a una especie de cazafantasmas que atrapa monstruos con su aspirador y los lanza rodando para impactar al resto de enemigos de la pantalla. Es el único juego que conseguí acabar entonces con una sola moneda.
Te preguntarás por qué te cuento todo esto, pero todo tiene relación con el juego del que os hablo hoy. Y es que el pasado 22 de mayo se estrenó para PC la versión en acceso anticipado de Slam and Roll, un juego desarrollado por Kaleido Games, un estudio español especializado en juegos arcade (Beekyr Reloaded o Vortex Attack). Y es que no hace falta más que echarle un vistazo a las capturas o al tráiler de Slam and Roll para identificar rápidamente que tiene una gran influencia de títulos como Snow Bros., Rainbow Islands, Bubble Bobble o mi favorito, Tumblepop. Así que en cuanto lo vi, tuve que echarle las zarpas encima, y ahora quiero contarte por qué debes jugarlo, así que acompáñame en esta aventura llena de enemigos y mucha diversión.
Una de las cosas que me parecen un gran acierto por parte de Kaleido Games ha sido tratar de adaptar la jugabilidad, normalmente muy desafiante, para todo tipo de jugadores. Por ello, incluye diferentes modos de juego para que puedas elegir el que mejor encaje contigo. Si eres novel en este tipo de juegos o buscas jugar partidas sin agobiarte en exceso, deberías jugar el TOUR, que no es sencillo pero te dejará ir avanzando por sus 8 mundos a tu ritmo mientras vas mejorando. Podrás recorrer fases por todo el globo, algo que recuerda al mítico PANG o al Tumblepop, o volver a jugarlas para sacar todas las estrellas o desbloquear secretos.
Para los jugadores más veteranos o los que aman los desafíos se encuentra el modo ARCADE, un modo clásico que se siente como una recreativa noventera. Donde deberás pasarte todas las pantallas y los jefes de cada mundo del tirón con tus vidas de inicio y un par de continues. Una hazaña complicada de lograr pero que tiene el aliciente de dejar tus iniciales con tu puntuación y competir con el resto de jugadores. ¿Se te ocurre algo más grandioso que llegar al número uno?
Si eres capaz de acabar el TOUR se desbloquea el modo CAOS, que cuenta con una dificultad endiablada y mucha diversión. Tiene la peculiaridad de que tiene combinaciones ilimitadas de niveles que se actualizan cada 10 días. Como ves, la rejugabilidad de Slam and Roll es altísima. Un juego al que dan ganas de echarle una partidita en cuanto tienes un rato libre.
Pero vamos al lío, Slam and Roll es un juego de acción y plataformas con una jugabilidad arcade de la vieja escuela que, es innegable, que te recordará al mítico Snow Bros. ya que su mecánica principal bebe por completo de él, así que en cada fase deberemos usar nuestro ataque deportivo, cada personaje tiene el suyo propio, para sepultar al enemigo y forrarlo como una pelota, para luego golpearlo y hacerlo rodar por la pantalla tratando de eliminar al resto de villanos. Algo que si conseguimos a la primera servirá para hacer más puntos. Los enemigos al ser derribados cual bolo suelta un objeto que puede ser para sumar puntos, un arma especial o una habilidad que se sumará a nuestro repertorio.
Pero a medida que juegas descubres que Slam and Roll es mucho más y tiene múltiples inspiraciones que te recordarán a juegos que veíamos en las recreativas o sus ports para las consolas domésticas. Por ejemplo, encontraremos niveles en que el objetivo es ascender hasta la cima escapando de las llamas que van subiendo que nos traen a la memoria a Rainbow islands (1987). Otros niveles serán de desplazamiento multi-scroll y nos obligarán a movernos tanto lateral como verticalmente algo que ya vimos en el clásico juego del Kiwi New Zealand Story (1988). Además, tenemos mecánicas originales que mejoran la jugabilidad como poder golpear en distintos ángulos. ¡Este juego fusiona muchos conceptos y el resultado es genial!
El título cuenta con un elevado elenco de enemigos con originales diseños a los que deberemos enfrentarnos y derrotar. Sus patrones de movimiento y ataques son muy variados, aunque me hubiera encantado que cada mundo contase con personajes típicos de la región. Le hubiese dado un toque más auténtico. Tras superar los diferentes niveles en cada mundo llegaremos al jefe final del mismo, que nos propondrá un desafiante y emocionante combate. Una batallas que además de ser divertidas se sienten únicas por sus mecánicas.
Para hacer frente a todos y cada uno estos obstáculos, nuestro personaje cuenta con una serie de objetos que puede recoger a media que elimina enemigos en forma de potenciadores que le permitirán hacer un doble salto, disparar más lejos, más potente, bajar de piso,... una serie de habilidades acumulativas que harán que las cosas sean más asequibles. Además, también encontraremos objetos que nos dan más puntos, armas como un dron que nos permiten eliminar a los enemigos restantes, sobres que desbloquean fases ocultas y bonus que nos llevan a pantallas especiales para hacer puntos. Me parece que la cantidad de contenido que tiene Slam and Roll es inmenso y eso es de agradecer.
Por si esto es poco te parece poco, me gustaría destacar el gran volumen de secretos en forma de niveles bonus, fases secretas que iremos desbloqueando e incluso un mundo oculto. Este último mundo es muy desafiante y está lleno de jefes, pantallas muy complicadas, que incluso tienen zonas en las que mueres si no te sabes lo que hay y que se pueden sentir un poco injustas, pero son poquitas y con unas cuantas repeticiones podrás superarlas. Cuando un título tiene tanta cantidad de detalles, contenido, objetos, enemigos,... sabes que un estudio ha puesto la carne en el asador.
En el apartado gráfico Slam and Roll cuenta con un pixel art colorido que le va niquelado a la jugabilidad tipo arcade. Las fases cuentan con escenarios y fondos representativos del mundo y se encuentran repletos de detalles muy cuidados. Personajes y enemigos tienen diseños divertidos y originales. Todo esto, unido a las melodías y efectos sonoros consiguen crear una atmósfera que se siente totalmente arcade, el aire retro que tiene todo es nostalgia pura.
En conclusión, Slam and Roll es una oda a la diversión y jugabilidad arcade, es la máquina que nos hubiera volado la cabeza en los salones recreativos a finales de los 80 y principios de los 90. Jugar y pasarlo bien como máxima prioridad. Su desarrollo se inspira claramente en juegos de la época como Snow Bros. o Tumblepop, pero más que como una copia, se siente como un sincero homenaje a todo un género.
La fusión de mecánicas conocidas con otras nuevas, adaptar la dificultad a todo tipo de jugadores, la enorme cantidad de contenido, la personalización de personajes,... y podría seguir un rato, pero todo esto lo único que hace es demostrarnos el cariño con el que se ha desarrollado Slam and Roll y lo bien que se han encajado todas las piezas. Para finalizar, solo me queda decirte que deberías echar una partida y mientras lo haces te imagines a tu niño interior metiendo una moneda de 25 pelas en la recreativa y simplemente disfrutando del momento.
- Hemos realizado este análisis en PC con un código proporcionado por KaleidoGames -
💚 Arcade puro
💚 Golpear enemigos y verlos rebotar
💚 El elevado número de mecánicas
💚 Está lleno de detalles
💚 Los homenajes
💚 Todavía faltan cosas por llegar
❌ Falta de conexión de enemigos y escenarios
❌ Zonas de muerte injusta
Director Retro & Pixel Press 📰
Podcaster en NESbuscando en la Basura y El Indiario 🎙️
Redactor en DeVuego 📝