Los hexágonos son la heroína del jugador de juegos de estrategia. Los seis lados del polígono son un mensaje claro: aquí hay que calcular movimiento, daño, zona de control y alcance. Those who rule aplica la plantilla hexagonal a una saga de juegos que homenajea desde el primer minuto en que arrancamos el juego: Fire Emblem. Veamos ahora qué propone Eldin Turulja, el desarrollador solitario que está tras este título.
La ambientación medieval no se pasa de moda. Aunque se quejen los críticos de que las espadas, los bosques llenos de monstruos y los grupos de exploradores están demodé, la realidad insiste en llevarles la contraria. En Those who rule comandamos a un grupo de soldados, los Rangers, que hacen las veces de guardia fronteriza, patrulla al servicio del reino y unidad militar de élite. Entre nuestros números contamos con arqueros, cruzados y guerrilleros diestros con una gran variedad de armamento para ponerle el día complicado a nuestros rivales.
Those who rule es un juego de acción táctica que no se mueve un milímetro de la propuesta que haría Intelligent Systems en una entrega de Fire Emblem, con sus luces y sus sombras. El juego está dividido en dos capas bien diferenciadas: las batallas tácticas y la gestión del grupo de aventureros. En la primera, tendremos que manejar, por turnos, a nuestras unidades para cumplir el objetivo del nivel, ya sea llegar a un punto concreto del mapa, defender una posición durante un número determinado de turnos, o matar a todas las unidades enemigas. En la segunda, haremos una gestión muy ligerita del inventario, las armas y los objetos que portan nuestros soldados, y leeremos la historia que se va desarrollando ante nosotros.
La capa interesante de jugabilidad es la primera, como es de esperar. Veamos ahora cómo funciona.
En “Those who rule” estamos ante un juego formular, a veces para bien y otras no tanto. Iremos moviendo a nuestras unidades por las casillas del nivel buscando optimizar nuestros movimientos y barrer a la oposición antes de que nos hagan lo propio a nosotros. En ese sentido, Those who rule presenta una variedad de opciones para plantear los combates que hacen que podamos resolver de bastantes formas cada mapa.
Nuestras unidades tienen una matriz de estadísticas entre las que se cuentan la vida y el escudo. La vida, que podéis ver en la barra azul de nuestros personajes, solo puede recuperarse con objetos o con personajes sanadores, pero el escudo, la barra blanca, va recuperándose cada vez que empieza nuestro turno. Esto nos permite usar ciertas unidades para absorber golpes y mantener la posición mientras envolvemos a los enemigos con unidades más rápidas. Flanquear a los enemigos nos da ventajas a la hora de atacarlos, y si les atacamos por la espalda no podrán contraatacar a nuestra unidad, así que la movilidad es clave. Contamos con tres tipos de armas de corto alcance, las lanzas, las espadas y las hachas, con una variación para las armas de dos manos, muy destructivas pero que nos obligan a cuidar más de las unidades que las empuñan por no llevar escudo.
Además contamos con arqueros que nos permiten atacar a distancia y usuarios de magia que curan a nuestras unidades.
Those who rule es un juego que mira todo el tiempo a Fire Emblem, para bien y para mal. En este caso, Turulja ha decidido imitar muy bien la estructura de las misiones de Fire Emblem, pero ha bajado un par de puntos la dificultad. Echo de menos que la IA fuera un poco más reactiva: se deja emboscar y rodear con mucha facilidad en ocasiones, y con frecuencia vamos a estar en superioridad táctica contra las unidades rivales.
En esta imagen, por ejemplo, podemos ver cómo, aunque haya más unidades enemigas en el tablero, en el pasillo donde están atrapadas mis unidades tengo una ventaja importante. Esto es así con muchos mapas, donde la IA no es capaz de enfrentarse a nosotros ya que no siempre moviliza a todas sus unidades.
Las condiciones de victoria suelen ser bastante amables, y pocas veces vamos a sentir una presión de tiempo que nos empuje a ser menos precavidos o a avanzar con todo, arrasando a la oposición pieza a pieza. Aún así quiero hablar con justicia de esta cuestión: el desarrollador ya ha anunciado que sigue manteniendo el juego, recibiendo feedback, y de hecho explica que está en vías de implementar un modo de dificultad mayor. Desde aquí aplaudimos la decisión.
Fire Emblem tenía un problema, y es que presentaba, entre niveles, una cantidad enorme de texto que, al menos desde mi punto de vista, no es demasiado interesante. Those who rule cumple punto por punto con el programa de Intelligent Systems, y nos ofrece una historia de intrigas políticas, traiciones y rivalidades que, honestamente, es superflua y poco integrada en la jugabilidad. Hay cuatro reinos luchando en un continente del que se nos explica poco, y sus personajes tienen un carisma limitado a sus retratos. No me gusta ser duro ni ácido cuando critico este tipo de desarrollos, pero tengo la sensación de que se ha ido mucho tiempo de desarrollo en una historia en la que abundan los clichés y la previsibilidad. No es malo usar un cliché, por supuesto, pero se echa en falta un trabajo más original con ellos. No se puede hacer todo bien cuando se desarrolla un juego en solitario, y este es sin duda el punto que más sufre en Those who rule.
“Those who rule” es un estreno estupendo para Eldin Turulja. Muchos desarrolladores independientes firmarían lanzar un título de este nivel en su primer juego. Sin embargo, a “Those who rule” le falta atrevimiento para separarse un poco de la fórmula que imita con tan buen tino. Espero ver más de este desarrollador en el futuro, y que vuelva con una versión refinada de este juego que nos trae al PC un género que suele quedarse encerrado en consolas.
- Hemos realizado este análisis en PC con un código proporcionado por Eldin Turuljas -
💚 La variedad de opciones con las que se pueden resolver los niveles.
💚 La variedad de unidades y de posibilidades de evolucionarlas.
💚 El botón para saltarse todo el diálogo de un nivel.
❌ Algunos bugs hacen que tenga que cerrar y volver a abrir el juego.
❌ Alguna misión es tan fácil que acabas viendo a tus unidades machacar a pobres soldaditos indefensos durante bastantes turnos.
José María es docente de profesión, jugón desde pequeñito y bocazas ocasional. Juega juegos de naves por voluntad propia y explica su historia en Defensores de la Galaxia. También habla sobre videojuegos independientes en su twitch semanal Indieseables.