- Muerte entre las flores -

Como la mayoría que de los que leéis estas líneas ya sabréis, el término metroidvania viene de las sagas Metroid y Castlevania, dos pilares que mezclaron con acierto la acción y la exploración en entornos 2D. Sin embargo, ha sido durante la última década cuando este subgénero ha florecido gracias al auge del desarrollo independiente. Títulos como Guacamelee! (2013), Ori and the Blind Forest (2015) o Hollow Knight (2017) han ampliado las fronteras y renovado el lenguaje y la forma de hacer este tipo de videojuegos. Tenemos incluso desarrollos españoles como Blasphemous (2019) o Metroid Dread (2021) que también han sido referentes en el género. Muchos de estos nombres comparten una raíz occidental, a pesar de que el germen fue plantado en Japón, en aquellos pasillos pixelados de los 80 que alguna vez diseñaron compañías como Konami o Nintendo. Ahora se han globalizado, y hoy en día se crean desde cualquier parte del mundo.

Regresamos al desarrollo japonés de la mano de Adglobe y Live Wire, que en Ender Magnolia abrazan una estética influenciada por las sensibilidades niponas, pero bebiendo a su vez de la impronta occidental que ha cosechado el género en los últimos años. Si en 2021 ya sorprendieron con Ender Lilies, en esta segunda entrega aspiran a ofrecernos una experiencia superior. 

Una magnolia brilla en la oscuridad

Décadas después de lo sucedido en Ender Lilies, nos encontramos en Humelia, un reino en ruinas que alguna vez confió su progreso a la magia y a la creación de homúnculos. Pero el sueño se torció cuando un humo tóxico surgido del subsuelo desató la locura y la violencia en estas criaturas artificiales, envolviendo al reino en una niebla de caos. En medio de esta desolación, Lilac despierta sin recuerdos en un laboratorio del Sector Inferior. Así comienza un viaje en el que tendrá que buscar respuestas a lo que está ocurriendo. 

Pronto aparece Nola, la primera de los homúnculos que luchará junto a nosotros. Lilac no combate por sí misma, pero posee el don de los afinadores, capaz de purificar la corrupción del núcleo de estos seres para que vuelvan a la normalidad. Iremos sumando aliados que nos otorgarán habilidades con las que podremos derrotar a nuestros enemigos. Cada uno de ellos tiene un tipo de ataque diferente, y utilizando determinados objetos los mejoraremos para que sean cada vez más fuertes y rápidos. Se incorpora además un ligero componente RPG, con subidas de nivel y equipamiento que mejoran los atributos de Lilac. El repertorio de sus acciones va aumentando a medida que progresamos, y como es habitual, podremos volver atrás para explorar zonas a las que no podíamos acceder. La exploración es esencial e intuitiva: cada zona se tiñe de azul al ser completamente explorada, facilitando el regreso a esos rincones que aguardan un secreto. 

Fantasía floreciente

El apartado gráfico es realmente bonito y preciosista. Sin embargo, su delicadeza a veces juega en su contra: falta un punto de aspereza y suciedad para transmitir la sensación desoladora que se le supone a este mundo lleno de muerte y decadencia. La música, en cambio, sí logra evocar y cautivarnos más; pero de eso hablaremos más adelante.

La narrativa presenta algunos altibajos, con un arranque con fuerza que genera un interés que poco a poco va decayendo. Nos vamos enfrentando a figuras corrompidas por fuerzas oscuras, sí, pero no siempre con una motivación clara. Además, el reparto de personajes que nos acompaña es muy grande y no se desarrolla demasiado. El amplio elenco de personajes que se une a nosotros esboza unas historias que, a veces, se quedan en la superficie, e incluso se nos mencionan personajes como el de Abelia que parece que van a tener un propósito importante, pero no llegan a aparecer en el juego.

Ender Lilies tiene fama de ser un juego difícil, y aunque su secuela no nos lo va a poner fácil, trata con esmero que la experiencia no sea demasiado frustrante. Las secciones de plataformas son agradables, y sin demasiadas complicaciones. El combate contra los enemigos es manejable, pero requiere atención y planificación de los recursos que obtenemos. Los jefes –especialmente hacia el final- sí que pondrán a prueba nuestra habilidad y paciencia. Confieso que Velgrynd me hizo activar el modo fácil. Por suerte, las muertes que suframos no tendrán penalización alguna más allá de llevarnos al último punto de guardado, conservando todos nuestros objetos y puntos de experiencia. Además, cuenta con niveles de dificultad e incluso podremos modificar manualmente parámetros como la salud de los enemigos o su poder de ataque.

Cantando bajo la lluvia

La música en Ender Magnolia es, simplemente, excelsa. Sus melodías de piano y sintetizadores son cautivadoras y acompañan muy bien las situaciones, siendo incluso inquietantes en momentos puntuales. Destacan los temas con la voz de Cassie Wei, que añade una capa emotiva extra y acaban siendo los más memorables. Esa mezcla de elementos electrónicos, acústicos y clásicos crea un paisaje sonoro muy particular, que encaja a la perfección con este mundo que se tambalea entre lo orgánico y lo artificial. Tras el trabajo sonoro en Ender Lilies, la banda japonesa Mili es de nuevo la encargada de componer esta obra.

Como todo buen metroidvania, Ender Magnolia ofrece un final alternativo condicionado por las misiones opcionales que hayamos completado antes del encuentro final. La lluvia eterna que causaba la muerte en Ender Lilies cobrará importancia en los compases finales para conectar argumentalmente las dos obras. Por desgracia, ambos finales se sienten apresurados, con una conclusión insulsa que no está a la altura de otros aspectos del juego. 

conclusión

Ender Magnolia es una flor pálida y brillante que florece en el vasto campo de metroidvanias, destacando por su solidez técnica y ofreciendo una experiencia disfrutable para los amantes del género. Los rincones de su mundo se exploran con goce, y el combate ágil y flexible mantiene el interés. Tan sólo le falta una pizca de originalidad y una dirección narrativa más definida para convertirse en un juego verdaderamente redondo. 

- Hemos realizado este análisis en PC con un código proporcionado por Binary Haze Interactive -